
(13/Sep/16) Angel Tirelli es el presidente del laboratorio Proagro, que estuvo presente en esta 88a Expo Angus de Otoño Bolívar 2016 con una veterinaria móvil, una combi transformada en un exhibidor de productos veterinarios. Antes de que se supiera quién se iba a quedar con el gran campeón macho, Tirelli habló con LA MAÑANA sobre su laboratorio y la presencia en la muestra.
¿Qué es Proagro?
Es una institución de 46 años de antigüedad, que tratamos de prestar el mejor servicio que podemos y hasta ahora lo estamos prestando bien, parece. Y ahora hemos decidido tener presencia marcada en casi todos los remates, haciéndonos presentes con un stand móvil como el que tenemos y también prestando atención a cuáles son los adelantos que se producen para estar alentando a los productores.
¿Cuáles son los principales insumos que comercializan?
Debemos tener unos 80 productos entre antibióticos, antiparasitarios, casi todo para bovinos, aunque un 20 por ciento de nuestra venta es para pequeños animales. Pero en general el mayor desarrollo que tuvo Proagro fue para grandes animales. Ya llegará lo de pequeños, porque vienen empujando.
¿Qué resultado les ha dado este stand móvil?
Para nosotros creemos que muy bueno, concitó una buena atención, entonces si uno se muestra y la gente viene es porque el objetivo se ha logrado, estamos muy contentos de haberlo hecho y vamos a seguir en el mismo tren de cosas.
¿Van sólo a remates y exposiciones de Angus o de todas las razas?
Vamos a distintas razas, en muchos casos a particulares de cabañas que nos llaman para estar presentes, y lo hacemos porque tenemos dos o tres stands rodantes, nos repartimos un poco. Y como notamos que gusta en la gente, es una forma de convocar distinta a la que se tiene con un stand fijo.
¿Esto lo hacen para acompañar a los clientes o también para ganar algunos nuevos?
Las dos cosas, no hay dudas. No podemos perder tiempo y teóricamente es la mejor forma de dar facilidades en cuanto a conocimiento de las cosas que vamos haciendo rápidamente. Si uno larga algo y lo muestra en 10 exposiciones de golpe, pega y gana posicionamiento. Esto es lo mismo que en la cadena comercial, y esta es la última cadena. Si no nos mostramos acá cómo van a entender.
¿Cómo han evolucionado con los años los productos veterinarios?
Viene empujando bastante bien Senasa con cambios que fue haciendo a través de las normas, una de ellas la GMP que existe internacionalmente, que nosotros la tenemos y podemos decir con orgullo que fuimos los sextos en conseguirla. Conocemos el riesgo de afrontar un gasto porque lo vemos después en su respuesta, es un costo más, tenemos un control de Senasa para certificar todos los años y debido a los registros y a los controles que exige, tener la norma implica un 15 ó 20 por ciento más. Pero si uno sabe que vuelve, está bien hecha la inversión. Y por otra parte, para exportar se necesita esto, entonces da una cierta ventaja sobre los competidores, acá somos competitivos sí o sí y jugamos a eso, nos encanta competir.
Con la apertura de las exportaciones de carnes se acrecienta la posibilidad de colocar más productos en más animales…
Por supuesto, es como que veníamos medio agachados, nunca dejamos de hacerlo; pero veníamos contenidos porque no teníamos margen como para hacerlo, y ya nomás ubicamos un par de gente que se dedica sólo a eso, más de la que teníamos, y estamos abriendo. Tenemos 18 países, algunos los hemos tocado y se abandonaron o no pudimos tener continuidad por la aprobación de registros, que es una cosa difícil. En Brasil estamos bien colocados pero un registro ahí a lo mejor tarda 7, 8 ó 9 años, y algunos más, acá también se tarda. Nuestros registros corren a la par de la ganadería en sí, no es un porcino en 180 días, tardan 4 ó 5 años, porque tienen que pasar etapas, control de residuos, etc., y está bien que así sea, porque es seguridad para la salud mundial, en buena hora. (Fuente: La Mañana de Bolívar).