El Banco Mundial redefine su enfoque en la agroindustria
Esto implica un plan para duplicar sus compromisos de agrofinanciamiento y agronegocios, alcanzando los US$9.000 millones anuales para 2030.
Actualidad26 de octubre de 2024El Banco Mundial anunció un cambio estratégico significativo en su enfoque hacia la agroindustria, con el objetivo de crear un ecosistema integral que apoye el desarrollo sostenible del sector. Este nuevo enfoque implica un plan para duplicar sus compromisos de agrofinanciamiento y agronegocios, alcanzando los US$9.000 millones anuales para 2030.
Este giro llega en un momento crucial, cuando cuatro tendencias clave, como el cambio climático, las innovaciones financieras, la digitalización y la fragmentación del sector, comenzaron a transformar el panorama agroindustrial.
Al mismo tiempo, se espera que la demanda de alimentos aumente en un 60% en las próximas décadas, lo que subraya la urgencia de abordar la necesidad de empleo en los mercados emergentes.
“Nos encontramos en una encrucijada, y el camino que elijamos hoy determinará el futuro”, afirmó Ajay Banga, presidente del Banco Mundial.
“El enfoque ecosistémico del Banco nos lleva más allá de los esfuerzos fragmentados hacia una constelación de soluciones que incluye desde el almacenamiento hasta la logística y la producción, con un enfoque central en los pequeños agricultores y las organizaciones de productores”, añade el directivo.
Este nuevo ecosistema se fundamenta en el trabajo realizado por el Banco Mundial en los últimos 16 meses para mejorar su eficiencia y coordinación, asegura un cable de la AFP publiado por el diario digital Portafolio
La integración de todos los recursos de la institución busca ofrecer un apoyo integral y soluciones personalizadas para el sector agroindustrial.
Planean fomentar una colaboración continua entre sus diferentes brazos: el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF), la Asociación Internacional de Fomento (AIF), la Corporación Financiera Internacional (CFI) y el Grupo de Múltiples Socios (OMGI). Esta colaboración tiene como meta movilizar $5,000 millones hacia el sector privado para 2030.
Los nuevos enfoques
1. Regulación y Normas: El BIRF ayudará a los países a desarrollar reglamentos que aseguren que sus productos cumplan con los estándares del mercado de exportación, así como asesorar en soluciones de tenencia de la tierra y redes de riego.
2. Financiamiento Climático: Se facilitará la reutilización de parte de los US$1.250 millones en subsidios a combustibles fósiles para fomentar prácticas agrícolas más sostenibles, desbloqueando así nuevas fuentes de financiamiento.
3. Conexión de Pequeños Agricultores: El BIRF colaborará con organizaciones de pequeños productores para mejorar su productividad y resiliencia, convirtiéndolos en proveedores confiables, mientras que la CFI proporcionará financiamiento y conexiones con empresas en busca de fuentes de producción.
El enfoque promete no solo aumentar la productividad agrícola y los ingresos de los agricultores, sino también generar empleos, mejorar la calidad de los alimentos y contribuir a un entorno más limpio. En conjunto, estas iniciativas buscan elevar la calidad de vida en comunidades vulnerables y asegurar un futuro más sostenible para la agroindustria(Noticias AgroPecuarias).