Escolaridad rural: problema grave en Recalde, por los caminos anegados y por la ausencia de transporte

Las falsas promesas de los políticos por momentos son abrumadoras. Terminan borrando con el codo lo que escriben con la mano, porque últimamente –en los últimos cinco meses precisamente- nos hemos cansado de escuchar y leer declaraciones del gobernador bonaerense Axel Kicillof, defendiendo a rajatabla la educación pública y atacando al gobierno de Javier Milei por ese motivo.

Frases de Kicillof hay muchas, sólo hay que ir a Google y se encuentran respecto de su defensa de la educación pública, además de su enfrentamiento con el Presidente ante el ajuste presupuestario que impacta de lleno en el sistema universitario nacional, en el que –hay que reconocer- el gobernador tiene algo de razón porque hay tres ejes en donde el Estado siempre debe estar presente: educación, la seguridad y la salud.

Dentro de esas frases podemos mencionar algunas como éstas: “La educación pública es una prioridad”, “vamos a defender la educación pública porque es el mandato del pueblo bonaerense”, “a la educación pública se la defiende, no se la ataca”, “no vamos a entregar la educación pública porque es un derecho que conquistó nuestro pueblo”, “un pueblo entero para defender la educación pública”, “a la educación la defendemos con compromiso y militancia”. 

Cabe recordar que Axel Kicillof, intendentes y funcionarios bonaerenses movilizaron a Plaza de Mayo recientemente. Mar del Plata, Olavarría, Azul y Tandil, entre tantas localidades, salieron a la calle a reclamar contra el desfinanciamiento de Javier Milei al sistema universitario. Allí, esa protesta está muy bien porque –como dijimos- la educación es la base de todo el desarrollo de un pueblo, nadie quiere un pueblo ignorante.

"A pesar del desprecio que muestra el Gobierno nacional por la educación pública y todo lo que esté vinculado al Estado, ese sentimiento está muy lejos del sentir de las grandes mayorías", agregó el mandatario provincial. Sus palabras tienen fundamento, sin dudas.

Más: en abril Kicillof inauguró el Jardín 920 del Partido de la Costa y resaltó “la necesidad de la inversión, decisión y compromiso para seguir construyendo escuelas. Los bonaerenses nos votaron para seguir ampliando derechos y para garantizar la educación pública porque significa un horizonte de oportunidades”. Y continuó: “El compromiso de este Gobierno provincial es seguir trabajando para materializar eso, cueste lo que cueste”.

Ahora bien, más allá de los problemas con las lluvias e inundaciones, con caminos anegados para llegar a las escuelas rurales, el gobernador “hace agua”.

Se ha olvidado de la base de las universidades, que son las escuelas y los jardines de infantes. Los rurales también, obviamente, los que hace ya un tiempo vienen sufriendo una terrible problemática. O dos problemáticas: los caminos están en pésimas condiciones, motivo que mucho sufre la gente del campo que quiere enviar a sus hijos a las escuelas. Y está el tema del transporte, algo en el que también tiene su injerencia el Consejo Escolar municipal. Entonces vayamos a fuentes que dijeron lo suyo sobre estos problemas:

--- “Esto se negocia entre el Consejo Escolar y los proveedores, y siempre el problema aparece en abril y mayo. Lo que cobran va muy por detrás de la inflación. Todavía no se abrieron las nuevas licitaciones, aunque sabemos que en Azul se ofreció un 59 por ciento de aumento, pero la inflación anual ha sido del 200 por ciento. Por recorrido son alrededor de 15 mil pesos y hacer ese recorrido, hoy, debería estar en 45 mil pesos. Debería aumentar el triple. Así que la gente de las combis prefiere no hacerlo porque si no pierden dinero”.

--- “En Olavarría todavía no hay negociaciones sobre ese tema. Hubo alguna conversación con el Consejo Escolar, pero nada está definido. Mientras tanto, hay deudas de meses anteriores con algunos proveedores de combis, aunque esto es algo lógico ya que les pagan dos meses después que hacen la facturación, algo habitual con todos los proveedores del Municipio. Esto pasa en la zona de Recalde y Mapis, así como Blanca Grande y la zona que va para el lado de Urdampilleta”.

--- “Los chicos y chicas no están yendo a la escuela en los últimos quince días, principalmente porque llovió mucho en toda la zona y no había caminos aptos para circular. Cuando los caminos estuvieron un poco potables, salta este conflicto”.

--- “En algunos casos hay alumnos que pueden ir a la escuela por la cercanía y porque tienen movilidad los padres, pero otros que no pueden ir a la escuela, especialmente los hijos de peones rurales porque no pueden bancar el costo de traslado”.

--- “Y ahí es donde dependen de la combi para llegar a clase. Hay chicos que deben llegar hasta un camino real que une Urdampilleta con Recalde (que es el que toma la combi) y hay que acercarse hasta ese camino principal para llegar después a la escuela primaria número 10 de Recalde “Martín Miguel de Güemes”.

--- “Otro dato no menor, que hace ruido: hay 7 familias que se trasladaron de Recalde a Espigas, y hay otras tantas pensando en hacer lo mismo. En Recalde son mil habitantes y que se vayan diez o doce familias, es algo que sin dudas hace ruido. El motivo principal es que sus hijos no pueden ir a la escuela de Recalde y sí lo harían sin problemas en Espigas. Sin dudas, un golpe fuerte para una localidad pujante, que tiene como delegada a Claudia Ricci”.

Veremos cómo sigue la historia, pero nadie duda de que este problema necesita una urgente solución.