Francisco Gutiérrez: de aquel pibe de 9 años que debutó en la pista, a este hombre que volvió a festejar en Palermo
Cabaña Tres Marías logró el Gran Campeón Macho en la Expo Palermo y Francisco, el hijo de Horacio y Susy, el nieto de Don Pancho, festejó como la primera vez. Son 25 títulos en esa arena que ya es como el patio de su casa. No quiso seguir estudiando y fue la mano derecha para gestar este fenómeno de la ganadería argentina, que es esta cabaña con sello inconfundible.
Expo Palermo 202430 de julio de 2024Darío FariñaPOR DARIO FARIÑA, ENVIADO ESPECIAL EN PALERMO. “Ahora estoy un poquito más tranquilo. Un poquito más, ya aterricé, después de lo de ayer ya aterricé”. Hasta el look había cambiado Francisco Gutiérrez (62), por más que estaba en los corrales, hablando con la gente y les explicaba detalladamente cómo es el manejo de los animales en el campo.
Ya de saco, más relajado, tranquilo y feliz. Abraza a su hija Juana y cuenta: “ella es médica cirujana oncológica. Desde chica dijo que iba a ser médica…yo le decía que lo pensara porque es duro, porque muchos pacientes se van…y ella me respondió “y los que se quedan…si no hay cirujanos oncológicos se van a ir todos”. Tiene razón. Y también agregó algo sobre su hijo Francisco: “Le puse ese nombre en honor a mi abuelo, no por mí. Cuando nació Francisco mi abuelo ya había fallecido, y le empezamos a decir Pancho. Es el Pancho 2. Es ingeniero industrial y trabaja en la fábrica del grupo Bimbo, en San Fernando” dice orgulloso.
Por supuesto, habló de su esposa Marina Raggio. “Ella siempre me acompañó cuando vivíamos en el campo, atendió el tema del pédigree, hacía las transferencias, todo eso. Cuando nos fuimos a vivir a Tandil, después de estar viviendo 17 años de vivir en el campo, ahora le cuesta más ir al campo”. Pero es ella la que le da el primer abrazo y el primer beso cuando Francisco festeja, tirándose para atrás, bastón en mano, mirando al cielo, cuando un toro de Tres Marías gana en Palermo.
El día anterior (el viernes 26) Francisco había desatado toda la locura que se lleva adentro, envuelta en mucha adrenalina, cuando Lee Wilson –el jurado canadiense- había consagrado al toro Centenario como el Gran Campeón Macho Angus de Palermo. Casi nada. El logro número 25 de cabaña Tres Marías, ubicada en el partido de Benito Juárez, en la mítica, emblemática, histórica y admirada arena palermitana.
Por más que la experiencia indique que lleva 25 títulos “acá”, hay que sumar alrededor de 70 en el exterior, de una cabaña que tiene su historia que Francisco, en una charla con campoindustria.com, detalló. Contó todo lo que puede contar tranquilo, sin la locura propia de cuando unos minutos después de lograr el Gran Campeón puede tener y sentir un cabañero de pura cepa. Entonces pudo contar mucho…y bueno.
Francisco, qué manera de ganar Tres Marías…
Impresionante. La verdad que fue un Palermo espectacular para la cabaña, ocho primeros premios, tres campeones, tres reservados, o sea seis animales fueron campeones reservados de categoría, el gran campeón macho, la tercer mejor hembra, genética Tres Marías también ganando como la gran campeón hembra, que era 100% genética Tres Marías, el tercer mejor toro que fue campeón ternero y gran campeón ternero, que es hermano de Centenario. O sea, por todos lados genética Tres Marías que anduvo muy muy bien, así que la verdad que un gran Palermo para la cabaña.
Tres Marías que no solamente a nivel nacional es reconocida, sino que también lo es a nivel internacional…
Sí, ya estamos presentes en más de 18 países. En Europa es muy poco, pero porque son pocas las cantidades que tiene cada uno, son muy pocas vacas que tiene cada criador, pero donde es más extensivo, como Canadá, estamos presentes así como Estados Unidos donde también estamos presentes. Y México, ni hablar, la genética nuestra está. Tenemos como 70 grandes campeones en los últimos 10 años en las principales exposiciones, la verdad que es una locura cómo estamos andando afuera. Y obviamente Brasil, Uruguay, Paraguay, Colombia, todos los lugares donde ya estábamos presentes, seguimos presentes, así que se va desparramando la genética. En realidad eso es un orgullo, porque vos decís, bueno, evidentemente me vienen a buscar de afuera la genética Tres Marías y entonces es un orgullo.
¿Una historia que arrancó Horacio Gutiérrez, tu papá?
La arrancó mi padre Horacio, porque mi abuelo Francisco (Don Pancho) fue el que se inició con hacienda comercial, tenía vacas generales. Mi abuelo era Don Pancho. En el campo siempre le dicen Don al patrón, y se llamaba Francisco, pero le decían Don Pancho. Mi abuelo vino de España con 3 años, con la madre y dos hermanos, murió el padre de él, y eran momentos muy complicados en España en ese momento, y tenía unos parientes acá en Argentina, en Benito Juárez precisamente. Entonces viajó desde España a Benito Juárez, mi abuelo nació en Ramales de la Victoria, en Santander, al norte de España. Se vino en barco hasta la Argentina, con la madre y sus dos hermanos, era 1901. Mi abuelo nació en 1898 y en 1901 vino para acá. Si bien se crió en la Argentina, y era argentino y él se sentía argentino, más allá también de español, como toda la familia en ese momento estaban unidos, él murió hablando en gallego, lo escuchabas hablar y era un gallego cerrado. Pero él siempre fue de querer mejorar genéticamente su rodeo general y para ello iba a los más importantes remates a comprar toros. Mi padre le dijo, ¿por qué no hacemos una cosa?...por qué no compramos vacas de plantel, armamos nuestro propio plantel y a partir de ahí nosotros nos producimos los propios toros. Así empezó Tres Marías, y empezó con que la sobra de los toros, pues producía un poco más, se la vendía a los vecinos. Y después cada vez había más vecinos que le pedían toros, bueno dale, hacete un poquito más y yo te compro. Y ahí empezó a crecer Tres Marías….67 años después, acá estamos, con esto y la genética desparramada en todo el mundo, así que la verdad que es una gran alegría.
¿Y vos y Johnny, y también Marcela, entre las vacas desde chiquititos?
Siii. Desde que nacimos. Nosotros nos criamos todos allá, hicimos toda la primaria en Bunge, en una escuelita rural de Bunge. Teníamos un refuerzo de una maestra particular y veníamos a rendir a fin de año acá a Buenos Aires como para poder tener el título provincial, no sé cómo era o se llamaba, no me acuerdo cómo era el tema ese. Pero hasta séptimo grado hicimos allá la primaria y para hacer la secundaria la venimos a hacer acá. En mi caso, que soy el burro de la familia, estuve un año en la facultad pero no era para mí, me quería volver al campo, no me gustaba Buenos Aires. O sea que estuve seis años, cinco años de secundaria y un año de facultad y después volví al campo, largué la facultad y me fui al campo.
Y te fue bien, no hay dudas…
Imagínate lo que quería hacer mi padre conmigo: me quería matar, pero me fue bien sí. En ese año estudié agronomía. Pasé el examen de ingreso y estuve un año en agronomía y después cuando saqué la cuenta de entre lo que tenía que recursar y demás y cada año me iba así, iba a tardar como 15 años en la facultad. Entonces dije “listo, no voy a estar tanto tiempo”, así que me voy.
Pero seguro que se le pasó el enojo a tu papá…
Sí, sí, la verdad que sí. Pero muchos años después, te cuento, y hace sólo dos años de eso, y te juro que me impresionó escucharlo decir eso, me dijo “te voy a decir algo, hijo, que nunca te lo dije: me alegré cuando dejaste la facultad, porque si vos hubieses sido profesional, yo no sé si te tenía ahí en el campo y me hubieses dado una mano; seguramente te hubieses ido a trabajar a alguna otra empresa y cuando yo quería acordar, vos ya no estabas más conmigo. Entonces cuando dejaste, en el fondo dije, para nuestra empresa es mejor”.
Y después se juntaron los tres…
Sí, estaba Marcela, yo y luego Johnny. Es que Johnny es el bebé de la familia. Somos cinco hermanos: Marcela, Inés, vengo yo que soy el tercero y Cristina es la cuarta. Tenemos 14 meses de diferencia en cada uno de nosotros y 11 años después apareció el nene, que fue Johnny. Mi papá Horacio cumple 92 el 1 de noviembre. Mi mamá, Susana Ferracini, tiene 89, aunque para todo el mundo es Susy.
Volviendo a Palermo, este viernes 26 de julio inolvidable con el Gran Campeón, ¿lo palpitabas, lo sentías?
Sí. Obviamente, más de una vez lo he sentido y después me quedé con la bronca de no haber ganado, pero...no la bronca, pero es como que te golpea...
Un sinsabor…
Exacto, un saborcito amargo. Pero este año yo lo tenía como fija y se dio, así que es una felicidad enorme.
Ustedes han ganado, como recién decías, 70 títulos pero siempre se quiere ganar más, decís ahora quiero el 71…
Esa cantidad es en México. Acá en Palermo, no. En Palermo ganamos 25 grandes campeones, que igual es una enormidad. Nosotros ganamos 25 grandes campeones y la que nos sigue es La Pluma de Firpo con 16. Ahora, lo que yo digo es que el día que no sienta lo mismo que sentí la primera vez que gané, me retiro de esto, de verdad. No sé, me quedo en el campo y después que me cuenten cómo salió. La verdad que sufrí lo mismo ayer que la primera vez que me tocó entrar a la pista.
¿Te acordás cómo fue aquella primera vez en la pista?
Sí. La primera vez que entré fue en 1971 con el tercer mejor toro. O sea, el mejor lo entró el cabañero, el segundo mejor el segundo mejor cabañero y el tercero lo entré yo a la pista. Con nueve años. Era 1971.
¿Es cierto que Horacio le vendía animales a la corona británica?
Sí, le vendió. Mi padre iba a comprar a Escocia como todos los cabañeros argentinos que iban a abastecerse de la genética de Escocia, a la exposición de Perth que era la más importante del mundo en ese momento, y la traían para acá. El Angus salió de allá, por eso había que ir a buscar allá que era donde estaba lo bueno. Y 120 años después, como salió en un artículo en Inglaterra, los alumnos le están enseñando a los maestros, porque de ellos se suponía que eran los maestros y ahora tenían los maestros que venir a comprarnos a nosotros y llevar desde la Argentina para mejorar su genética. Y dentro de los clientes que tuvimos allá entre Escocia e Inglaterra fue la cabaña de la corona británica.
Cambiamos de tema Francisco: se viene el remate de Tres Marías…
Sí, se viene el remate que es el 15 de agosto. Siempre es el tercer jueves de agosto. Todos los años venimos queriendo mejorar la genética, mejorar la preparación de los animales, y es como que nos faltaba una vuelta de tuerca en la parte de la comercialización. Siempre lo comercializamos con Ganadera Azul, con Enrique Adrogué y Julio Ruiz, quien es mi cuñado. Siempre anduvo muy bien, pero decíamos -y yo lo hablaba con ellos- quiero media vuelta más de tuerca, porque algo tenemos que mejorar en la comercialización, hasta que por ahí surgió la idea de Alfredo S. Mondino. Lo charlamos, nos costó a lo mejor en algún engranaje terminar de procesarlo, pero cuando estuvo listo, dijimos incorporemos a Mondino. Se lo propusimos y Roberto (Mondino) al toque dijo “sí, me interesa”. En un momento Roberto dijo “yo no voy a agarrar más remates de cabañas”. Le digo, sí, pero yo te hablo por el de Tres Marías, “listo, a ese se lo agarro”, me dijo, y ahí vamos con todo. Y ahora vamos a dar el primer remate en común Ganadera Azul y Alfredo S Mondino en las instalaciones de la cabaña.
¿Qué cantidad de animales van a salir a la venta?
Se van a vender 50 toros de pédigree, van a salir 140 toros puros controlados, en total son 190 toros que salen a la venta, más 35 vaquillonas y terneras de pédigree, y 150 vaquillonas puras controladas, de las cuales hay como 80 y algo que son con cría al pie de otoño, y el resto salen como preñadas.
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POR DARIO FARIÑA. En Expo Palermo 2024, campoindustria.com estuvo presente gracias al acompañamiento de: Asociación Argentina de Angus, Alfredo S. Mondino (Súper Main Sponsors), Cabaña Arandú, Cabaña Don Romeo, Asociación Criadores de Hereford, Asociación Argentina Productores Limangus, Asociación Braford Argentina (Main Sponsors). Y los Sponsors: Cabaña Dona Angélica, Estancia La Elisa, Administración Cook, Alzaga Unzué y Cia SA, Cabaña Santo Domingo, Transporte Don Simón, Cabaña San Marón, CGS Centro Genético del Sudeste, Cabaña La Trinidad, Cabaña La Soñada-Agrinsur, Cabaña La Fortaleza, Cabaña San Miguel, Cabaña La Reserva, Cabaña Los Vascos, Cabaña Los Pirulos, Cabaña Don Rodolfo, Cabaña La Coqueta, Cabaña Don Eloy y Cabaña La Camila.