Francisco Garín: “Que prueben Rústicos, porque eso hace que vayamos sembrando para el futuro”
El gerente de haciendas de Alfredo S. Mondino tuvo sobre su espalda una gran parte de la responsabilidad en el éxito del remate de Rústicos que se realizó en Claromecó el 22 de noviembre. Para Fran significaba un enorme desfío ya que no estuvieron ni don Alfredo ni Roberto, pero junto con el gran equipo de la consignataria las ventas y la organización fueron exitosas.
Coberturas28 de noviembre de 2024Darío FariñaPOR DARIO FARIÑA. Mano derecha absoluta en Alfredo S. Mondino. No hay dudas. Todo gira a su alrededor cuando se trata de venta de hacienda. Capaz, detallista, exigente. Aun con su perfil bajo, de hablar lo justo y lo necesario, es tremendamente respetado. Inclusive por quienes están más arriba que él dentro de la empresa, lo que no es poco.
Así es Francisco Garín. Fran o Francho (para Roberto Mondino). Y se ganó ese lugar con una dedicación tremenda, respaldada por una enorme capacidad para gestionar. Su amistad con Roberto viene desde el jardín de infantes –por si alguno no lo sabía-, pero una vez que ingresó a trabajar en la consignataria de Del Campillo, se fue haciendo un lugar. Importante. Y un nombre.
Don Alfredo Sebastián Mondino, el Negro para todos, es quien está arriba de todo. Pero para él seguramente es otro hijo más. Y tanto Marcos como Roberto (su hermano de la vida) lo quieren, por supuesto, pero también lo respetan. Y lo admiran.
Y tuvo en el Rústicos Especial Vientres –que se realizó el viernes 22 de noviembre en Claromecó- un desafío más grande todavía. Más allá de que Sergio Amuchategui (el organizador) con su equipo se encargaron de la logística y detalles organizativos, había que vender 1.250 vientres Angus, y Francisco Garín y su tremendo equipo de ventas (más los martilleros Julián Bicondoa y Pedro Althaparro) lo hizo posible. Sin fisuras.
Y lo del desafío era también porque esta vez no pudo estar prsente Roberto Mondino, el líder natural en todos los remates. Pero todo salió excelente, así que luego del remate Fran habló con campoindustria.com para hacer un balance de una jornada de tres horas a pura venta.
Francisco, ¿era un desafío doble?, porque es un contexto de país complicado, más allá de que las últimas lluvias le sacan una sonrisa al productor, y no estaba el jefe…
Los jefes. Fue el primer remate sin Alfredo y sin Roberto, una responsabilidad enorme, pero creo que salió bien, que estuvo lindo, que hubo muchos compradores, un remate muy genuino, con muchas corridas, con mucha gente en el zoom, en el teléfono, viendo por el Canal Rural, en la sala, así que muy contentos.
Vos decías mucha cantidad de lotes y también mucha cantidad de compradores, porque no se repetían mucho; es más, sólo un par de compradores se repitieron, uno llevó dos lotes y otro tres, pero si no se fue repartiendo un poco la cosa, ¿no?
Sí, es lo mejor, es lo mejor que le puede pasar a un remate, que haya muchos compradores, que prueben Rústicos, que prueben la mercadería, porque eso hace que vayamos sembrando para el futuro. Por ahí en algún remate que hacés muy buenos precios, pero son pocos compradores que compran mucho, después el año que viene se complica y de esta forma yo creo que sembramos para el futuro el remate de Rústicos.
¿Esperabas un Rústicos así, de esta manera, como se dio?
Y…estábamos con mucha incertidumbre, al no hacer preoferta y eso, uno nunca sabe cómo le va a salir. Se trabaja para que salga así, pero a veces te sale, a veces te sale un poquito peor, otro poquito mejor, pero hoy salió muy bien, los vendedores muy conformes, así que creo que todo el mundo contento.
¿Por ahí la preoferta puede ser bueno o puede ser algo que te juegue en contra en este caso?
No, no, la preoferta es solamente más trabajo. Te da más tranquilidad, sí. Sabés quién está por cada lote, pero por ahí son cosas que pasan. Antes se hacían los remates siempre sin preoferta, físicos, y hoy dimos un remate muy lindo, habíamos trabajado para que salga así, todos teníamos órdenes y todo eso, así que salió lindo.
¿Había cierto temor o cierta incertidumbre al principio?
Sí, la apertura de cada categoría -sobre todo- es dura porque no sabés dónde estás parado, pero una vez que vendiste uno, dos, tres lotes de cada categoría, ya sabés más o menos cómo vienen los precios, las manos que tenés, dónde están ubicados en la sala, en el teléfono y fluye un poco más.
Salió un Rústicos redondito, creo que todos quedaron contentos, tanto los que vendían como los que compraron
Sí, sí, totalmente, fue un Rústicos muy ordenado, muy lindo, muy contentos todo. Y con precios de buenos a muy buenos, así que salió perfecto.