Angel Aguilera y su cabaña Don Romualdo: “Cuando quisimos acordar estábamos en el pédigree y bailando con la novia esta que tenemos ahora”

POR DARIO FARIÑA, ESPECIAL EN PALERMO. Como dice Angel, y tantos cabañeros que se animan a competir, mirarla de afuera es una cosa y desde adentro es otra, totalmente distinta. Hasta la adrenalina, seguramente, se eleva a niveles altísimos. Pero después de dar el primer gran paso, después del debut, es como que todos toman otro envión, adquieren experiencia, conocimientos y se animan a volver.

Angel es Angel Aguilera (54), propietario de cabaña Don Romualdo, ubicada en Sierra de los Padres, cerca de Mar del Plata, y en esta Expo Otoño –en su 82ª edición- se largó con todo. Fue debut para romper los miedos, pero le fue bien y entonces ahora quiere más, va por más, y seguramente estará en la tradicional Expo Palermo.

Para la Expo Otoño estuvo acompañado por su familia (su esposa Paula Kletzel; sus hijos Juan Cruz -24- y Catalina -5-, y su hermana Sandra. “Julián se quedó en el campo. Y también tenemos a Valentino -11-, que es hijo de Paula”, aclara Angel antes de la charla con campoindustria.com, luego de la jura de clasificación).

¿Cómo fue la experiencia Palermo y Expo Otoño?

Fue interesante, productiva, aprendimos muchas cosas, ya que nosotros somos nuevos, así que compartimos con la familia, lo pasamos muy bien. Y sumamos una más, vamos de a poquito, recién arrancamos. Fue debut total en Palermo para nuestra cabaña Don Romualdo. La verdad que uno siempre lo mira de afuera y para uno que recién empieza es una experiencia bárbara.

¿Qué te imaginabas y con qué te encontraste?, ¿qué descubriste?

Venimos siempre y una cosa es verlo de afuera y otra es vivirlo ahí adentro como participante. Te sorprende porque hay muchas cosas, es fuerte, es muy fuerte. ¿Qué descubrí desde adentro?...el nivel de excelencia en la preparación que hay, está en un nivel muy alto. Todos los colegas cabañeros presentan al detalle todos los animales y el nivel de exigencia me sorprendió bastante.

Hablás de detalles, ¿cuáles?

La preparación de los animales es tremenda, es tremenda. Vos ves dos o tres personas trabajando en un animal, en el pelo, ya vienen con una alimentación. Es todo muy competitivo en un primer nivel, es un Fórmula 1, es correr en Fórmula 1 esto.

Y obviamente viene bien para medirte, para aprender y decir “bueno, la próxima cuando vengo voy a cambiar algunas cosas”, ¿es así?

Seguro, seguro, sobre todo los que recién empezamos que no tenemos tantos animales en preparación. Vos ves entre los tuyos, es el más lindo, pero lo ves después con los demás, venís a la pista y te sorprende a veces la diferencia que hay entre algunas cabañas y otras en ese tema. Tuvimos la suerte de no desentonar con la vaquillona, anduvimos muy bien, sacamos el tercero, pero te sorprende todo, te sorprende el nivel que hay.

Todos dicen que ves tu animal en el campo y es el mejor, pero después cuando venís acá decís, “epa, el al lado está mejor”

Sí, es confrontar con la realidad, aparte que este año fue un récord en el tema de inscripciones, todo el mundo trae lo mejor y ya no se guardan casi nada y podés repetir en Palermo, entonces van a por todo todas las cabañas.

Digamos que la Expo Otoño es un pre Palermo, los que venían acá después pueden ir a Palermo con los mismos animales y van a Palermo, así que es una competencia que ya tiene un nivel muy, pero muy alto

Si, si, es increíble el nivel que tenemos en estos momentos, en la raza no se regala nada.

Pero lo bueno es que no te arrepentís, no importa salir tercero, cuarto o lo que sea, todo es lo mismo, está bueno venir y ver dónde estás

Sí, tal cual. Estar ya acá es un premio para nosotros, después las cabañas grandes están por otra cosa, pero para los chicos estar acá es un premio y si lográs una cucarda ya es muy satisfactorio.

¿El balance en general es positivo desde todo punto de vista entonces?

Sí, totalmente, totalmente. Porque, te repito, venimos a sumar porotitos y a aprender, entonces siempre va a ser positivo. Ya lograr estar acá con una buena preparación, no desentonar, eso es muy bueno, muy bueno.

Contame cuándo, cómo y por qué nace la cabaña

La cabaña es nueva, relativamente, tiene cinco años; nace porque soy un apasionado de las vacas y vengo a Palermo desde toda la vida, desde que tengo memoria a mirarla de afuera y siempre dije algún día voy a estar acá. Y bueno, la vida se fue dando y fuimos armando la cabañita despacito, primero compramos una vaquillona, después otra, después hubo gente del ambiente muy buena, como Maxi Mammoliti y algunos que ahora me estoy olvidando que me dieron una mano grande para arrancar y de a poquito vamos creciendo y nos vamos apuntalando en la raza.

¿Hoy qué plantel tenés?

Hoy tenemos 12 madres de pédigree y estamos por el RP 20 y pico ya, en crecimiento despacito, pero bueno, hay que ir de a poco.

Es que la ganadería se avanza despacio

Y…es muy lenta y lleva tiempo, hay que tratar de enhorrar los pasos, de ser lo más prolijo posible para que sea un crecimiento constante.

Sí, va despacio, pero lo importante es no desviarte de ese camino, de ese objetivo, por ahí contando con el asesoramiento de Julito Fernández, que debe ser la mano derecha en eso, ¿no?

Sí. Julito es uno de los que me dio una mano grande cuando arrancamos, así que Julito vamos a decir que es Julio Fernández. Es un amigo, así que es uno de los que me dio una mano muy grande también.

Después de esta Expo Otoño, ¿qué viene?. Porque creo que esta exposición te debe inyectar un poco de optimismo y de ganas

Seguro, seguro, uno es un apasionado de esto y siempre va por más, así que vamos a seguir metiéndole y queremos crecer y ahora el objetivo es algún día lograr una bandera. Así que hay que laburar hasta que se dé, hay que laburar hasta que se dé.

Vos estuviste siempre en ganadería, ¿cómo es tu historia?

Mi familia no es ganadera. Mi viejo (Romualdo) compró un campito y yo ya tenía unas vaquitas por ahí dando vueltas siempre y ahí empezamos con el crecimiento. Todo era comercial, hacíamos cría, invernada y terminación a corral. Después cuando llegamos a un techo en un momento dije “bueno, vamos a empezar a mejorar por la calidad de los animales”. Y cuando quisimos acordar estábamos en el pédigree y ya estábamos bailando con la novia esta que tenemos ahora.

Ya que meterte en PP, también es jugar en Primera

Y sí, sí, sí, sí, que meterte en Puro Pédigree a mí me gusta, porque me gustan los desafíos, así que lo disfruto, el día a día lo disfruto.

Te metiste en Expo Otoño que es la UEFA League y si después llegás a la Expo Palermo ya es la Champions League

Si podemos llegar a la Champions….vamos a ver si llegamos, pero tenemos ganas de presentarnos de nuevo con la vaquillona que anduvo bien acá en la Expo Otoño, creemos que va a llegar mejor todavía, así que por ahí vamos a probar suerte en la Expo Palermo.

Un paso enorme…

Sin dudas. Un gran salto. Mi viejo era lechero en Mar del Plata, en su época tenía el reparto de leche, arrancó con el carro pero después fue evolucionando con el tiempo. Después tenía un reparto con la camioneta y estábamos ligados al campo por intermedio de mi abuelo materno, Felipe. Yo desde que nací iba al campo del abuelo y después iba a pasar las vacaciones al campo del abuelo. Así que por ahí arranca más o menos la historia.

Y la familia apoya siempre

Sí, la familia siempre apoya, la verdad que son incondicionales porque tenés que tener una familia así, si no tampoco lo podés lograr porque le restás tiempo a tu familia. Por ahí ahora esta semana la compartimos acá en Palermo porque ellos se vinieron, me acompañaron, mi señora trabaja y dejó sus cosas para acompañarme, lo mismo que mi hermana. Mi hijo Julián, que es el más grande, se tuvo que quedar en el campo, porque alguien tiene que quedarse en el campo, y los demás nos vinimos para Palermo.

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Por Darío Fariña. En la 82ª Expo Otoño Angus, campoindustria.com estuvo presente junto con: Asociación Argentina de Angus, Alfredo S. Mondino (Main Sponsors), Sáenz Valiente Bullrich, Seanmetal SRL y las cabañas: Don Romeo, Arandú, Tres Marías, La Soñada, El Paso, Zelduar, Nirihuau, San Severino, San Valentín, La Z, Nuevas Tierras, Don Romualdo y Santa Cecilia.