Alberto Alem y la satisfacción de que la cabaña La Soñada se haya convertido en “el lugar” de la prueba pastoril bonaerense de Angus y CREA Sudoeste

POR DARIO FARIÑA. Se realizó la segunda jura fenotípica de la segunda prueba pastoril en la provincia de Buenos Aires que en forma conjunta organizan la Asociación Argentina de Angus y CREA Sudoeste, que tiene lugar en la cabaña olavarriense La Soñada, de Alberto Alem y su esposa María Ester Cier.

Y los 59 toros pasaron por el ojo del jurado Manuel López y –realmente- se los vio mucho mejor respecto de la primera jura fenotípica que se realizó en abril (en aquel momento los toros habían sufrido más las condiciones climáticas, tanto sequía como agua por demás).

Para el dueño de casa, una enorme satisfacción. Porque, sin dudas, no deja de ser una enorme responsabilidad que 25 cabañas hayan dejado en su campo el cuidado de sus animales, 59 toros que están alimentándose a pasto, en el marco de esta prueba que realmente ha llegado para quedarse en el territorio bonaerense.

Que tendrá la tercera y última etapa en agosto próximo, para luego llevarse a cabo el remate que tendrá lugar en Bahía Blanca a cargo de la consignataria Productores Rurales del Sud, por lo que los reproductores (tanto PP como PC) están transitando la última etapa. Para Alem, la adrenalina estará presente hasta el último momento y esto fue lo que le contó a campoindustria.com luego de la jornada realizada el miércoles 18 de junio:

Tini, vos que tenés los toros acá en tu casa, los vas viendo cómo estaban desde la primera jura a la segunda, creo que han mejorado, ¿no?

Sí, la verdad que los vi muy bien, ayer los estuvimos pesando y tomando algunos datos de la circunferencia escrotal y la verdad que vi una mejoría notable y hoy en la jura se vio. Los toros estaban muy lindos, hay algunos toros que ya estarían para vender y todavía falta un montón, así que todo muy bien.

Sí, porque entre el grupo A fueron 37 toros esta vez, una buena cantidad

Sí, y se achicó mucho el grupo 4 en el que hubo sólo 5 toros, que la otra vez había habido un montón en ese grupo, no me acuerdo cuánto, pero capaz que alrededor de 20, y ahora la verdad que mejoró muchísimo el estado de los toros.

Para vos sigue siendo un placer todo esto de la prueba pastoril en tu casa, en La Soñada

Sí, me encanta, me encanta, me encanta porque se aprende mucho, me gusta mucho la parte social, estar en contacto con otros cabañeros, compartir experiencias. Esto no deja de ser una novedad, porque pareciera que lo estuviéramos haciendo hace 20 años, pero hace recién dos años y yo creo que es algo que vino para quedarse. El tema de poder comprar un toro criado a pasto, 100% con garantía, de Angus, de CREA Sudoeste, con todos los análisis que se te puede ocurrir, yo creo que está muy bueno.

Es una prueba pastoril que ya se metió en la provincia, una nueva forma de vender toros, y algo totalmente muy bueno y positivo para todos los productores, que de a poco van a ir descubriendo un poco más la prueba

Yo creo que es bueno para el comprador, para el que precisa toros, y también es bueno para el cabañero, porque ahí es donde el cabañero ve lo que está produciendo. Porque seamos realistas que en la Argentina se produce a pasto y tener un toro hecho a pasto, 100%, con toda la garantía porque esto está supervisado. Si bien a la prueba la hago yo en mi cabaña, está supervisado por Angus, de alguna manera auditada, por decirlo de alguna manera, es decir que tiene una seguridad de 100% de seguridad que es a pasto. Yo creo que eso no tiene precio.

Además es algo que valoran todos los productores que vienen, llegan y ven cómo están los toros, y es algo que están descubriendo de alguna manera y les viene bien por sus animales

Sí, esto demuestra un poco que se puede hacer un toro a pasto. Por ahí, bueno, hay que buscar las líneas genéticas, trabajar en eso, pero está bueno, porque viste cómo es: el alimento balanceado tapa todo. Están buenas las dos cosas, o sea son dos sistemas distintos, pero esto es algo que suma, que yo creo que llegó para quedarse, porque es un canal más de venta y de compra, que en Córdoba ya se hace 30 años y están haciendo la prueba de manera espectacular. Nosotros estamos haciendo un poquito de escuela y al principio, como todo, cuesta un poco, pero el año pasado nos fue bien y espero que este año nos vaya mejor.

Lo que es criar a pasto, es como que desnuda un poco más las virtudes y también desnuda algún defecto en el toro, ¿no?

Sí, o sea más que nada los defectos, y las virtudes también. Porque un toro que se engorda a pasto no es fácil y con alimento es mucho más sencillo,  y yo creo que ese es el valor agregado que tiene el toro criado a pasto. Más que nada a pasto que no es dicho por el cabañero vendedor, es a pasto y supervisado y auditado por Angus y CREA, no hay secretos y están todos muy bien cuidados, comen todo lo mismo, andan todos juntos en la misma parcela, todos comen el mismo pasto, no es que haya dos o tres grupos. Es un solo grupo, están todos juntos.

Se los vio tranquilos durante la jura…

Tal cual. Charlando con compradores, me decían que los toros que han llevado de acá, de la primera prueba pastoril, salieron de servicio en perfecto estado, y después destacaban la mansedumbre, porque vos imaginate que estos toros son de 25 cabañas distintas, llegaron, se juntaron todos, se tuvieron que hacer amigos por decirlo de alguna manera. Nosotros tuvimos un poco de laburo los primeros días porque un poco se peleaban, lógico, pero después los toros es como que sociabilizan. Vos viste que cuando hacemos la prueba, los toros son mansos, y eso que hay gente mirando, hay ruido, el micrófono, y se puede laburar tranquilamente, o sea yo creo que es un muy buen sistema de venta, y de compra también porque es bueno para el comprador también.

FOTOS: Matías Uvilla (campoindustria.com).