La Sociedad Rural de Olavarría tuvo su gran fiesta: 240 personas, cena, baile y distinciones

La Sociedad Rural de Olavarría está viviendo un 2023 distinto, con un envión que comenzó a tener el año anterior con la organización y sede de la Nacional de Primavera Angus. Y este año el cambio de sede, que la llevó de la calle Coronel Suárez a su predio ferial en el que solamente faltan detalles nada más para dejar listas las oficinas (que ya están funcionando, obviamente), más la Nacional de Primavera Angus que se realizará del 18 al 23 de septiembre, hacen que la SRO dé un nuevo salto de calidad. 
 
Por ese cambio de sede fue que organizó una espectacular cena y baile que se llevó a cabo el viernes 11 de agosto en uno de los amplios salones que la institución posee en su predio ferial, con la participación de 240 personas. Inicialmente eran doscientas, pero luego el cupo se amplió un poco más y quedaron muchos afuera, que a último momento quisieron comprar la tarjeta pero no hubo lugar. 
 
Sin dudas, un enorme aliciente para la institución que preside Eduardo Alem que de esta manera continúa en un camino ascendente, en pleno crecimiento y mirando hacia un norte en el que siempre le esperan cosas importantes. Fue una gran fiesta, sin dudas, que al ingresar ya se veía una “escenografía” distinta con tractores de Massey Ferguson, ya que Hausagro estuvo apoyando e instaló vehículos de la marca a unos metros de la puerta de acceso al salón. 
 
La presencia de Horacio Salaverri, presidente de Carbap, fue uno de los puntos salientes de la noche. El dirigente de una de las entidades emblemáticas del agro argentino llegó hasta Olavarría, ya que la Sociedad Rural también forma parte de su seno. Asimismo, se hizo entrega de varios reconocimientos y entonces la noche fue sumamente cálida en ese aspecto, ya que recibieron distinciones muchas personas que hicieron, y hacen, un gran trabajo por la SRO.

Cinco frases del presidente Eduardo Alem

Durante la fiesta, el presidente de la Sociedad Rural de Olavarría Eduardo Alem hizo uso de la palabra, y estas fueron las cinco frases para resaltar de su discurso:

— “Es importante, como institución, tener el apoyo de todos ustedes que valoramos mucho. Sabemos que las instituciones son fundamentales, cualquiera que sea, para que lleve la problemática de cada rubro en forma ordenada y orgánica hacia el sector político para lograr las mejores soluciones. Esa es nuestra función. Y cuanto más asociados tengamos y más fuerte seamos, más representativos, mejor todavía”.

 
 
— “No quiero ser autorreferente, pero no me pesa para nada ser presidente porque gracias a la comisión directiva que tenemos soy un agradecido; tenemos subcomisiones que trabajan muchísimo y nos cuesta a veces que se conozca todo lo que hacen en los distintos rubros. Pero les aseguro que se trabaja muchísimo, en forma independiente con un sistema muy horizontal en el que se valora tanto el trabajo como los logros de cada uno de la comisión, lo que es importante”.

— “También aprovecho el momento para darles las gracias a todo el personal que trabaja en la Sociedad Rural, tanto en las oficinas, como prensa y en la parte operativa en el predio, que se logran muy buenos remates ferias. El predio está así, tan bien, gracias a ellos. En la comisión directiva estamos de paso y ellos están siempre, por lo que se tienen que ir amoldando a las circunstancias con los nuevos dirigentes”. 
 
— “Quiero resaltar a nuestro gerente, Alberto Tito Zulaica, que hace muchos años que está con nosotros, es un “pibe nuevo que estamos probando” (risas). Es cierto que cuando él se convenció de que era momento de mudarnos al predio, que era un sueño de tantos años, se lo puso realmente al hombro y es el máximo responsable de que se haya logrado. Gracias Tito”.

— “Como institución estamos abiertos a que se arrime toda la gente del sector. Sabemos que se requiere tiempo, dedicación y responsabilidad, pero siempre estamos tratando de superarnos y respetando a la gente que nos ha antecedido, valorando lo que han hecho. Básicamente, quiero agradecerles a todos”.

Horacio Salaverri: “No hay que sentirse culpables, no formamos precios”

— “Quiero agradecer a la Sociedad Rural por esta invitación y veo cómo han cambiado y modernizado sus oficinas. Estamos en un momento de festejos, pero hay algunas cosas que me gustaría dejar como idea. Los productores agropecuarios tenemos algunos complejos de cómo nos ve la sociedad, si estamos haciendo las cosas bien o mal, y desde la dirigencia tenemos los mismos problemas porque también somos productores. Si hay algún productor que no comparte algo con la Rural, piensa que alguien va a defenderlo por lo que si se acerca, es mejor; y si somos muchos más, es mucho mejor.

 — “Vamos a seguir trabajando por todos y a esa seguridad la tienen. Nos van a seguir acompañándonos y estoy seguro, porque si se mira para atrás y hay pocos, todo es más difícil. Hay que arrimarse a trabajar, a estar. Cuando se fundó la de Olavarría y se ve la constitución de cada entidad, se fundaron por los mismos problemas que tenemos hoy. Pasaron 100 años y están los mismos problemas. ¿Fracasamos?, no lo sé, hay que analizarlo, si fuimos nosotros o los gobiernos, pero los problemas están y hay que seguir atendiéndolos. Por eso necesitamos estar todos juntos.

— “Hay otro concepto que nos pone mal y es cómo nos ve la gente y qué idea tiene de nosotros. A veces nos piden hasta explicaciones, y seré simple: nos acusan y nos ponemos colorados cuando aumentó la carne, y al primero que le ponen un micrófono es al productor. Pero no hay que sentir ninguna vergüenza de eso. Porque no somos formadores de precios, porque cuando el kilo de carne vale 600 pesos en la carnicería cuesta 3.000, ¿y acaso somos responsables de eso?. Yo soy tambero, 95/100 pesos el litro de leche y luego cuesta 400, ¿y yo soy el responsable?.

 — “No nos sintamos responsables, no lo somos. Los responsables son la política, la inflación o los malos gobiernos, pero no los productores que seguimos trabajando. Libérense de las culpas. No justifiquemos lo que no podemos justificar. Justificamos lo que vale para nosotros y nos pagan. No somos formadores de precios.

— “Me quiero llevar dos cosas: primero, seguir trabajando y segundo libérense de las culpas. No somos culpables de nada. Somos, de alguna manera, responsables de lo que podemos hacer por el país. Eso sí. Siempre dijimos que somos parte de la solución, así que vayámos con esa idea esta noche”.

Los tres homenajes y distinciones que se realizaron

La Sociedad Rural de Olavarría, a punto de cumplir 78 años, a través de su comisión directiva quiso realizar en esta fiesta tres distinciones/homenajes. Fueron estos:

Héctor Martín Eyheramendi. Desde 1964 en la comisión directiva, fue presidente desde 1975 a 1991, ocupó diferentes cargos en Carbap y CRA y fue uno de los fundadores de Funsagro Olavarría. En 2007, Carbap destacó su paso por esta institución como un gran dirigente y se entregó una plaqueta que tenía en su poder la SRO por aquella distinción, por lo que fue pasada ahora a su hija Lucrecia. Se la entregó el actual presidente de Carbap, Horacio Salaverri.

 “Agradezco muchísimo este momento. Mi padre entregó el cuerpo y el alma a esta entidad, y fue casi su segundo hogar. Eso decíamos siempre. Lo formó y la quiso mucho. Como dato de color, decíamos que lo mejor que le dio la Rural fue el yerno, porque nos conocimos acá, en los corrales de la Sociedad Rural hace 40 años. Muchas gracias por todo en nombre de mi padre”, dijo Lucrecia, quien recibió la plaqueta de manos de Horacio Salaverri.

Norma Urruty. Fue inquieta y soñadora. Ocupó la presidencia de la SRO después del fallecimiento de un enorme dirigente como Raúl Iguíñiz. Le tocó, en 2008, un conflicto crucial para el campo, con un conflicto, pero mostró templanza, coraje, templanza y decisión en su cargo como presidenta.

“Norma demostró lo que había que hacer como presidenta en un momento muy complicado, ahora se ve todo más fácil con el diario del lunes, pero damos fe que se hizo cargo de la situación, de cómo la manejó y gracias por motivar a varios de nosotros para trabajar en una institución” señaló Eduardo Alem antes de entregarle la plaqueta, que reza: “Gracias por tu dedicación y compromiso en tu paso como presidenta de esta institución”.

“Gracias por este premio y gracias a todos los productores por el acompañamiento. Realmente el 2008 fue una casualidad que me encuentre en el lugar que me encontró. Todo fue posible por el acompañamiento de todos los productores del partido. Recibí llamados de muchos que estaban lejos y no pudieron venir, productores que se negaron a hacer la fiesta de Recalde en apoyo al movimiento, y todo eso sumó y tuvo un valor impresionante. Fue un deleite ver esa unión de los productores, unidos, luchando, fue una maravilla. Como lo es hoy, ver a todos acompañando en esta cena. Es una sorpresa. Me pone contenta verlos y los insto a que cada uno sume otro más para el año que viene. Felicitaciones por esta hermosa fiesta a esta comisión directiva” dijo Norma Urruty.

Alberto Zulaica. Cuando se habla de Sociedad Rural de Olavarría siempre se piensa en un hombre, en un nombre, que conoce esta casa como pocos” dijo el conductor Marcelo Manolio, “que sin dudas tiene puesta la camiseta. Ingresó cuando tenía 14 años, en enero de 1971, en el verano para hacer de cadete y luego se incorporó definitivamente como administrativo. Y desde 1996 como gerente, por lo que lleva más de 50 años de trabajo y dedicación. El mismo dice que la Rural es su segunda casa. Y la SRO le entregó un merecido presente a Tito, que le puso siempre pasión, responsabilidad, sin horarios, en un lugar de trabajo que lo siente como propio.

 La plaqueta se la entregó Eduardo Alem. Y decía: “La Sociedad Rural de Olavarría reconoce al gerente Alberto Zulaica por más de 50 años de trabajo y dedicación al servicio de la institución”.

“Muchas gracias a la comisión. No sé qué decir. Pero no me quiero olvidar de cuatro personas que ya no están: de Tite Eyheramandi, quien fue mi primer presidente, un tipazo en todos los sentidos; de Raúl Iguíñiz, con quien al principio no nos mirábamos muy bien pero fue la persona que más lloré desde el fallecimiento de mi padre; Quelo Calahorrano, que fue mi primer gerente, el que me llevó a la Sociedad Rural y a quien sucedí en ese puesto; y de Gregorio Palomeque, quien me enseñó a trabajar en las exposiciones. Un recuerdo para ellos cuatro.

“El trabajo de la Sociedad Rural no es fácil. Porque yo no tuve 50 años con el mismo jefe. Tuve doce o trece presidentes, me llevé muy bien con todos, en un marco de amistad y de respeto, y tuve más de doscientos miembros de comisión directiva, por lo que siempre trabajé con gente distinta todos los años. Pero gracias a Dios con todos me llevé bien. Les agradezco a todo el personal de la Rural por bancarme siempre, y gracias a la comisión y a todos. Gracias”.